Los datos ponen en duda la idea de que el país norteamericano da la bienvenida a la inmigración
Agencia Reuters
Las detenciones de ciudadanos mexicanos residentes en Canadá se han disparado desde que, en diciembre pasado, el Gobierno levantase el requisito de visa para los nacionales del país latinoamericano. En los cinco primeros meses del año, los arrestos de mexicanos se han más que duplicado respecto a los dos años anteriores juntos, según las cifras oficiales a las que ha tenido acceso la agencia Reuters. Esta evolución desvanece parcialmente la imagen de Canadá como una nación más amable con los inmigrantes que Estados Unidos.
Solo en abril, las detenciones de ciudadanos mexicanos en Canadá se multiplicaron por 14 respecto a las cifras de noviembre del año anterior, el mes en el que Donald Trump se alzó con la presidencia de EU. Entre noviembre y marzo, el número de mexicanos que solicitaron asilo en Canadá se cuadruplicó.
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, prometió en 2015 —en el transcurso de la campaña electoral— levantar el requerimiento de visa para los nacionales mexicanos en un intento de mejorar las relaciones bilaterales entre ambos países. Desde diciembre, los mexicanos que visitan Canadá solo necesitan un permiso electrónico que pueden obtener en cuestión de minutos. El Gobierno de Trudeau, en cambio, ha recibido importantes presiones de la oposición para revertir el nuevo esquema de visas bajo el argumento del coste que supone para las arcas públicas.
Muchos mexicanos han visto en Canadá una posible salida migratoria alternativa a EU. Más aún cuando la Administración Trump ha incrementado las deportaciones y ha puesto el foco sobre los migrantes que residen ilegalmente en suelo estadounidense.
Las autoridades canadienses pueden detener, de forma indefinida, a extranjeros que supongan un «peligro colectivo», si su identidad no está clara o si se considera improbable que vayan a acudir a una llamada oficial.
Ali Esnaashari, un abogado residente en Toronto especializado en la representación de mexicanos detenidos en Canadá, remarca la «presión significativa» sobre los detenidos para que abandonen el país. «Habitualmente se les dice: ‘Puedes permanecer detenido o dar marcha atrás y cancelar tu petición de entrada en el país», destaca. «La mayoría para una noche o dos en el centro de detención migratoria y acaba subiéndose a un avión de vuelta a casa».
El número de ciudadanos mexicanos que solicitaron la extensión de la residencia temporal en Canadá casi se duplicó entre noviembre y marzo.