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Alejandro Fernández / Fotos: Yolanda Mendoza / AM de Amarillo Magazine
Perryton, Tx.- Las imágenes son dantescas, casi apolalípticas…
De decenas de casas quedan sólo escombros. En otras, semidestruidas, asoma la cajuela de los autos de las cocheras colapsadas, como queriendo gritar, como pidiendo auxilio.
Dos torres metálicas de telefonos gigantescas derribadas al borde de la calle; árboles con troncos de hasta un metro de diametro arrancados de cuajo; innumerables postes de luz han sido derrotados y yacen en el suelo.
El paisaje parece arrancado de una película, y entre tanta destrucción, se yergue imponente la solidaridad.
Si, Perryton, Texas, distante a unas 105 millas al noreste de Amarillo, ha sido arrasado por un tornado devastador que ha dejado una estela de destrucción masiva. En un evento ‘de víctimas masivas’ han dicho las autoridades.
De acuerdo a una gráfica satelital posteada por Angel Martínez y reposteada por la presentadora del clima de Telemundo y estudiante de Meteorología, Nubia Martínez, el meteoro se formó al noroeste de esta localidad. Atravezó con rumbo sureste prácticamente todo el centro y los barrios aledaños a esa zona y en cuestión de minutos le partió el corazón a esta tranquila comunidad, apenas acostumbrada a fuertes vientos y chubascos de temporada.
Tres personas fallecidas, más de 50 heridas -cifra que se eleva a más de 100 por quienes sufrieron heridas leves, raspones, magulladuras, etc.- y dos desaparecidas, es el reporte preliminar que han dado a conocer las mismas autoridades temprano este viernes 16.
Entre tanta devastación, caras de desconcierto y miedos, el voluntariado es esperanzador.
Cientos de personas, en su mayoría hispanos, acuden en masa en apoyo a remover escombros, láminas, pertenencias de los moradores de trailas destruidas, de las que extraen pedazos de madera, muebles amontonados, juguetes, trozos de lo que fueron adornos.
“No sabemos ni por dónde empezar”, dice aturdido un espontáneo sobre la calle Cedar.
El recorrido es en un gigantesco cuadrado entre las calles 1st y 4ft, que cruzan con las calles Fir, Elm, Date y Cedar, mayoritariamente hispano, justo en el epicentro del tornado.
Sin luz, teléfono ni gas, -hasta las 2 pm- los 8 mil 500 habitantes de este poblado han acometido la solidaridad como su mejor aliado. Familiares, amigos y espontáneas vienen y ayudan. Son como ángeles entre los escombros.
Justo es decirlo, decenas de policías y oficiales de diferentes departamentos estatales como el de Manejo de Emergencias enviado por el gobernador Greg Abbott entre seis agencias estatales más; la Policía de Borger, los Bomberos de Boker, distantes a una 20 millas al noreste, ambulancias, personal médico, hay de todo.
La solidaridad encuentra un ejemplo en Jazmín González.
Esta hispana, propietaria de un negocio de limpieza, ha llenado un carrito de esos que se jalan. Por ahi del mediodía compró un madral de burritos. Trae de huevo, chorizo, frijoles y muchas aguas. Sus tres hijos, que la acompañan a regalarlos a pie, sonríen inocentes…
